Tedio y cansancio se apoderan de mi alma.
No encuentro consuelo a mi angustia, salvo compartirla en estas lineas.
Los días parecen siglos y las noches tan largas...
Veo chispazos de felicidad y esperanza, de amor y amistad, de sueños por cumplir, y me aferro desesperada a ellos, pero continuó inmersa en la tristeza que lo plasma toda con un manto negro con la muerte... que acecha en cada esquina....
Donde quedó la niña tierna e inocente que habitaba en mí?
Hola Camila la niña sigue en ti, buscala. Un abrazo
ResponderEliminarEres también la luz que apagas,
ResponderEliminarla sombra que te sigue...;
Eres la lágrima
que te derrama. También eres tu.
No tengas miedo de ti misma
si aún estas esperándote.
Es sorprendente como logras plasmar emociones fuertes y sublimes, pero a la vez suaves y exquisitos, a través de las palabras.
ResponderEliminarSolo puedo decirte que recuerdes que la tristeza no perjudica, pero sí el darse por vencido. Esta vida aún no ha logrado derrotarnos. Continuemos fieles a nosotros mismos, a lo que somos y a lo que representamos, hasta el final.
Gloriosa publicación.
Saludos.
Lisístrato.