Un poema debe tener el filo suficiente para abrir la carne y llegar al alma. Autor desconocido

viernes, 15 de octubre de 2010

El hombre y la mujer

El hombre es la más elevada de las criaturas
La mujer es el más sublime de los ideales.
Dios hizo para el hombre un trono; para la mujer un altar.
El trono exalta; el altar santifica.
El hombre es el cerebro,
la mujer; el corazón.

El cerebro fabrica la Luz; el corazón produce el Amor.
La Luz fecunda; el Amor resucita.

El hombre es fuerte por la razón,
La mujer es invencible por las lágrimas
La razón convence; las lágrimas conmueven.

El hombre es capaz de todos los heroísmos,
La mujer de todos los martirios
El heroísmo ennoblece; el martirio sublimiza.

El hombre tiene la supremacía
La mujer la preferencia
La supremacía significa la fuerza; la preferencia representa el derecho.

El hombre es un genio
La mujer un ángel
El genio es inmensurable; el ángel indefinible.

La aspiración del hombre es la suprema gloria
La aspiración de la mujer es la virtud extrema
La gloria hace todo lo grande; la virtud hace todo lo divino.

El hombre es un código
La mujer un evangelio
El código corrige; el evangelio perfecciona.

El hombre piensa
La mujer sueña
Pensar es tener en el cráneo una larva; soñar es tener en la frente una aureola.

El hombre es un océano
La mujer es un lago
El océano tiene la perla que adorna; el lago la poesía que deslumbra.

El hombre es el águila que vuela
La mujer es el ruiseñor que canta
Volar es dominar el espacio, cantar es conquistar el alma.

El hombre es un Templo
La mujer es el Sagrario
Ante el Templo nos descubrimos; ante el Sagrario nos arrodillamos.

En fin, el hombre está colocado donde termina la tierra;
La mujer donde comienza el cielo.


Victor Hugo (1802-1885)

3 comentarios:

  1. Una linda poesía para la más linda de las estrellitas de este cielo...

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  2. Muy buen post, me gustó. En relación a los mineros, si es un milagro, uno puede abordar el tema desde muchas miradas, yo lo veo por el lado positivo, si es show o no, si hay aprovechamiento o no, son pequeñeces, lo que importa es que están bien los 33 en la superficie jejeje. La foto del post del 11 de octubre, me gusta mucho, hace unos años vi una versión más contemporanea que no he vuelto a ver, me gustó mucho y la guardo en la memoria jejeje. Saludos, nos leemos

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  3. Así es, lo más rescatable de todo esto es que todos salieron sanos y salvos.

    Con respecto al beso, es una foto de Robert Doisneau tomada en 1950. Si quieres más información visita http://antcastillog.blogspot.com/2009/05/el-beso-del-hotel-de-ville.html

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